Debido al éxito que tuvo Devil May Cry, Capcom decidió hacer un reboot; conservando algunos personajes y elementos de los originales, pero dándole un gran cambio a la historia.
Género: Aventura/Hack n’ slash
Desarrollador: Ninja Theory
Distribuidor: Capcom
Lanzamiento: Marzo 10 del 2015
Plataformas: PS4, PC, Xbox One, PS3 y Xbox 360
Devil May Cry es uno de los juegos hack n’ slash más queridos por los gamers. A lo largo de cuatro juegos, todos aprendimos a querer al badass Dante y su venganza contra los demonios. Cuando Capcom anunció el reboot, mucha gente se les fue encima. Todo empeoró cuando se mostró el nuevo diseño de Dante. ¿Pero realmente DmC: Devil May Cry es un mal juego? ¿O serán la nostalgia y el miedo del cambio los que hablan por los fans?
¿De qué trata?
DmC: Devil May Cry nos cuenta la historia de Dante, un jóven en sus veintes. Es sarcástico, chistorete, grosero y altanero. El típico chico que cree que todo lo puede. Desde muy temprano en el juego comienza la acción, pues Dante fue encontrado y mandado asesinar por el Rey Demonio. Mundus tiene la humanidad a sus pies a base de la deuda, control de los medios y un peculiar refresco.
Dante es llevado ante la Resistencia, donde conoce a Vergil, quien resulta ser el líder. Ahí, el protagonista recordará cosas sobre su pasado y sus lazos familiares con Vergil. Es ahí cuando se convence que debe luchar contra Mundus, para vengarse de él por lo que le hizo a su familia.
Pero Dante no está solo. De su lado tiene a Vergil, una medium llamada Kat, y a sus queridas armas: su espada Rebellion, y sus pistolas Ebony & Ivory.
¿Cómo se ve?
DmC: Devil May Cry fue lanzado originalmente para el PS3 y Xbox 360 en el 2013. La realidad es que Ninja Theory tuvo dos largos años para adecuarlo a la nueva generación, lográndolo moderadamente. En las misiones y escenas de acción no tendremos ningún problema, pues el juego corre bastante fluido con 60 fps. Sin embargo, en las cutscenes -donde podría haber mucho más detalle- da la impresión de que sigue siendo un juego de la séptima generación.
Digno de mención es el limbo. Gran parte de las misiones las pasarás en este mundo alterno, el cual es muy parecido a nuestra realidad, pero con diferencias notables. El limbo tiene un aura maligna que lo rodea, haciendo que parezca oscuro y con voluntad propia. A veces se moverá y te atacará. Se ve impresionante.
¿Cómo se oye?
DmC: Devil May Cry es un juego…interesante en el aspecto auditivo. Durante las misiones “disfrutaremos” de sonidos estridentes combinados con gritos y efectos fantasmagóricos que ponen los pelos de punta. El audio de DmC realmente te hace sentirte en un mundo demoníaco.
Las batallas tienen sus temas aparte, los cuales podría describir como una “mezcla de dubstep y metal pesado”. Oirás distorsión sintetizada combinada con guitarras eléctricas, batería y gritos guturales. Dependiendo de tu gusto musical puedes disfrutar u odiar el soundtrack del juego. Sin embargo, no se puede negar que ese intro de guitarra eléctrica cuando empiezan las batallas te dan un golpe de energía para destruir todo a tu paso.
¿Cómo se juega?
El estilo de batalla de DmC: Devil May Cry es un hack n’ slash clásico, muy parecido a God of War. Al comenzar el nivel de alguna forma estás orientado a llegar a cierto punto, pero eso no evita que te desvíes para explorar el terreno y encontrar objetos ocultos.
Mientras vas avanzando, llegarán oleadas de enemigos a tratar de destruirte. Ellos irán aumentando en nivel de dificultad y número, pero tu tendrás muchas armas a tu disposición.
Dante puede luchar con su espada Rebellion, sus pistolas Ebony & Ivory, el arma angelical Osiris, el arma demoníaca Arbiter, y más que irás consiguiendo conforme avanzas. Podrás encadenar combos ilimitados, cambiando entre armas y diferentes combinaciones de botones. También podrás comprar aún más combos y movimientos en la tienda del menú de misión. Así, con una cantidad gigantesca de armas y movimientos, el límite es tu imaginación.
Por supuesto, al final de la misión se te otorgará una puntuación basada en el tiempo que te tardaste, el “estilo” (variedad) de tus ataques, y la recolección de objetos ocultos. Con ello conseguirás dinero para comprar aún más cosas.
Hay que mencionar que aunque la historia es interesante, no es muy larga. DmC: Devil May Cry nos permite conseguir muchas armas, objetos, movimientos y personalizaciones, y puede parecer que no son bien aprovechadas por una campaña de alrededor de diez horas.
¿Volverlo a jugar?
Si te gusta conseguir todos los objetos ocultos, logros, trofeos, etc. sin duda disfrutarás de un replay de este juego, pues hay bastantes coleccionables a los cuales sólo puedes acceder regresando a misiones anteriores.
Si eres fan de los juegos hack n’ slash te tengo una buena noticia: DmC: Devil May Cry tiene cinco niveles de dificultad. El último de ellos hace que Dante muera de un solo golpe mientras sus enemigos tienen defensas comunes; estos modos se van desbloqueando conforme te vuelves a pasar el juego. Sin duda lograr acabar el DmC: Devil May Cry en todos estos modos es una hazaña increíble que no todos lograrán realizar. Así que si eres overachiever o te crees muy pro en este tipo de juegos, DmC tendrá un gran replay value para tí.
Conclusión
DmC: Devil May Cry es un reboot en toda la extensión de la palabra. Mantiene elementos que nos recuerdan las raíces de la franquicia, pero añade características nuevas que nos permiten jugar algo fresco y diferente. Este juego es un hack n’ slash llevado a cabo casi a la perfección; y a pesar de tener un par de errores y una campaña algo corta, es un juego que sin duda disfrutarás.
Pros:
+ Sistema de lucha fluido e intuitivo
+ Gran variedad de armas y combos
+ Diseño de personajes y niveles excelente
+ El limbo
Contras:
- Campaña algo corta
- Gráficos no tan buenos durante las cutscenes
Calificación: 8.3
ESM
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